Daphne y C. Martin “Marty” Wood III comparten una pasión de toda la vida por la naturaleza y los deportes tradicionales al aire libre y están decididos a transmitirla a las nuevas generaciones.
Aunque Daphne creció en el sur y Marty en el norte en la década de 1950, sus infancias estuvieron unidas por la exploración de la naturaleza. Marty se crió en Greenwich, Connecticut, cerca de lagos y bosques. Su padre le enseñó a cazar y pescar, deportes que todavía disfruta con avidez. "Prefiere pescar que respirar", bromea Daphne. Daphne se crió en Thomasville, Georgia, con una familia profundamente ligada a la tierra. Es una habitante de Thomasville de cuarta generación y pasó su infancia en la granja de 150 acres de la familia. Desde los cuatro años, pasó tanto tiempo como pudo al aire libre rodeada de animales, incluida su inusual colección de mascotas: un toro Angus en miniatura, un poni Shetland y palomas mensajeras. El padre de Daphne enseñó a sus cuatro hijas a cazar codornices; Daphne aprendió a los 12 años y todavía le encanta coger una escopeta tan a menudo como puede.
A los Woods no solo les interesa la recreación al aire libre, sino también observar el mundo natural. “De niña me fascinaba la naturaleza”, dijo Daphne. “Podía sentarme y observar a las hormigas encontrar y transportar comida durante horas”. “Me encantaba acercarme sigilosamente a la madriguera de un zorro rojo en el bosque, a 500 yardas detrás de nuestra casa”, dijo Marty. “Me fascinaba ver a los cachorros jugar”.
Ambos asistieron a campamentos de verano cuando eran niños, Daphne en Carolina del Norte y Marty en Maine. “Hasta el día de hoy recuerdo esos veranos sin preocupaciones como algunos de los recuerdos más felices de mi vida”, dijo Daphne. Pasó su tiempo haciendo caminatas, nadando, disparando, montando a caballo, haciendo piragüismo, tiro con arco y aprendiendo sobre la naturaleza. Marty siente lo mismo, recordando vivir al aire libre con solo un lago frío de Maine para bañarse.
Esas experiencias felices y formativas inspiraron a los Woods a brindar oportunidades similares a miles de niños de Florida. Son partidarios desde hace mucho tiempo de la Red de Centros de Conservación Juvenil de Florida (FYCCN), una asociación público-privada de 350 miembros que brinda a 230.000 jóvenes experiencias al aire libre cada año. Las joyas de la corona de la Red son los centros educativos al aire libre que funcionan todo el año y que administra la Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida (FWC).
Entre ellos se encuentran el Everglades Youth Camp en el condado de Palm Beach, el Teneroc Youth Conservation Center en Lakeland, el Ocala Youth Conservation Center en el Ocala National Forest y el nuevo Suncoast Youth Conservation Center cerca de Tampa. Daphne, Marty y otros donantes con ideas afines han ayudado a construir o renovar los edificios de los campamentos, a equiparlos con kayaks, aparejos de pesca, microscopios, redes de recolección y mucho más. El Daphne Flowers Wood and Charles Martin Wood III Education Center en Tenoroc lleva su nombre en su honor. También han otorgado becas a niños y adolescentes de familias económicamente desfavorecidas. “Es muy importante que los niños tengan estas experiencias”, dijo Daphne. “¡No te preocupas ni defiendes algo de lo que no sabes nada!”.
Daphne fue presidenta y actualmente es miembro de la junta directiva de la Fundación de Pesca y Vida Silvestre de Florida, y Marty es asesor del Comité de Finanzas y Auditoría de la Fundación. Ella y Marty también son líderes voluntarios de la Estación de Investigación y Conservación de Tierras Tall Timbers cerca de Tallahassee, uno de los principales centros de investigación del país, entre otras cosas, sobre los beneficios de las quemas controladas para mejorar los ecosistemas y el hábitat de la vida silvestre. Daphne es secretaria de Tall Timbers, mientras que Marty preside la Fundación Tall Timbers.
“Estar en la naturaleza es una especie de meditación. Me encanta subirme a un puesto de ciervos en los árboles y simplemente fusionarme con mi entorno, o sentarme en mi porche y ver cómo el bosque despierta”, dijo Marty. Su propiedad está protegida por una servidumbre de conservación permanente. Como donantes, también apoyan la conservación de especies menos conocidas, desde ballenas francas y mariposas azules de Miami hasta murciélagos bonetes de Florida. Están igualmente comprometidos con la lucha contra las especies invasoras, habiendo financiado los premios para el primer Python Challenge en 2016.
Daphne y Marty nos han inspirado durante mucho tiempo y su dedicación de toda la vida a la conservación, los programas para jóvenes y la recreación tradicional al aire libre. ¡Les agradecemos profundamente!
