
Por: Kyle Grammatica
Gracias a los investigadores de la Universidad de Florida, es posible que tengamos una nueva herramienta en la lucha contra el pez león invasor: la trampa Gittings. Su investigación, publicada en agosto en la revista científica MÁS UNO, destaca una trampa económica y de diseño simple que captura peces león sin afectar a los peces nativos. La trampa Gittings lleva el nombre de Steve Gittings, científico jefe de la Oficina de Santuarios Marinos Nacionales de la NOAA y uno de los autores del estudio. La trampa consiste en una red unida a un marco circular de metal o tubo de PVC y tiene bisagras que le permiten abrirse y cerrarse como una concha de almeja. En el medio de la trampa se encuentra el cebo: un simple trozo de celosía de plástico. Para los peces león, la estructura de celosía de plástico se asemeja a su hábitat de arrecife, por lo que naturalmente se reúnen alrededor de ella. Una vez que los peces león están dentro de la trampa, se tira de ella hacia arriba, las bisagras se cierran y queda una red llena de peces no nativos en la superficie. Uno de los aspectos más emocionantes de la trampa Gittings es la falta de impacto que tiene en los peces nativos. Durante las pruebas de los investigadores en arrecifes artificiales en el norte del Golfo de México, los peces león tenían 10 veces más probabilidades de ser atraídos por la trampa que los peces nativos.
La trampa Gittings es prometedora, pero en su forma actual, todavía no es tan eficaz como la pesca submarina en aguas poco profundas. Sin embargo, se han encontrado peces león a profundidades superiores a las que pueden alcanzar los buceadores con arpón, por lo que la trampa Gittings podría utilizarse para capturar a estas especies invasoras, a las que antes no se podía acceder. Se necesita más investigación para comprobar la eficacia de las trampas en los arrecifes naturales y ver si sus tasas de captura pueden permitir su uso con fines comerciales.
Acerca del pez león
El pez león es originario del Indo-Pacífico y del Mar Rojo, pero ha establecido poblaciones no nativas desde Carolina del Norte hasta Florida y hasta Sudamérica. Se lo puede encontrar en casi todos los tipos de hábitat marinos y vive en aguas de hasta 300 metros de profundidad. Se informó de su presencia por primera vez en la costa atlántica de Florida en 1985 y, desde entonces, ha aumentado rápidamente su área de distribución y población.
Los peces león son peces depredadores de arrecife que se alimentan vorazmente de los peces nativos de Florida, lo que reduce su población. La pérdida de peces nativos afecta negativamente la salud general del hábitat del arrecife, ya que cada especie tiene un papel ecológico importante. Si los peces nativos no cumplen con sus funciones, surgen problemas como el crecimiento descontrolado de algas y la salud del arrecife se ve afectada. Los peces león también compiten por el alimento con peces depredadores nativos como el mero y el pargo. Tienen 18 espinas venenosas que los defienden de los depredadores, aunque su carne no es venenosa ni tóxica. De hecho, ¡son deliciosos para comer!
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